En enero pasado, una tormenta azotó a Portugal, con fuertes vientos de hasta 80 millas por hora y fuertes lluvias. El desastre, que se describe como la mayor catástrofe natural en Portugal en los últimos años, se debe a un fenómeno meteorológico ciclón monstruo llamado ciclogénesis explosiva.
Una de las áreas donde se puede ver la naturaleza en toda su furia fue en Porto, en el muelle que alberga el Faro de Felgueiras. El fotógrafo Veselin Malinov estaba en el lugar, donde fue capaz de captar estas increíbles fotografías de enormes olas que parecían como si quisieran tragarse cualquier persona que se interpusiera en su camino.
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